¡Desposeído!
Con el alma a medio andar
Lenta la caminata
Con los pasos cortos
Bajo la candencia muerta
De melancólicos hilos
Que confeccionan las vestiduras fúnebres
Haciendo gala omnipresente
El llanto verbo enardecido
En las oraciones lejanas
En los milagros incumplidos
Repitiendo el compás
Una y otra vez
Dando paso a su muerte súbita
Manuel Enrique
No hay comentarios:
Publicar un comentario